1. Los datos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero presentes en los informes de Responsabilidad Social Corporativa de Repsol YPF son sesgados, reduccionistas y carecen de valor científico. No existe un control real de los vertidos en las áreas de explotación de los países periféricos y obvian los derrames y fugas de las empresas subsidiarias así como durante el transporte desde el pozo al consumidor/a. En un estadio en que el planeta se enfrenta a una emergencia climática Repsol no reduce la emisión de gases que provocan el mentado Calentamiento Global.
2. Repsol YPF sigue operando en Áreas Protegidas, de un frágil e incalculable valor ecológico. Destacamos los últimos vertidos de miles de barriles de petróleo en el Parque Nacional y Reserva de la Biosfera Yasuní (Ecuador), la quema y venteo de gases en el Parque Nacional Aguaragüe (Bolivia) o el reciente ingreso en el interior de la Reserva de la Biosfera Norpatagónica (Argentina).
3. Repsol sigue invadiendo territorios indígenas en África y América Latina. Se han documentado incumplimientos del Convenio Nº169 de la OIT, suscrito también por el Estado Español en 2007, en cuanto a la desinformación y no consulta a las poblaciones afectadas por sus actividades. La empresa pretende explotar el Bloque 39 en Perú, área amazónica fronteriza con Ecuador, donde se ha evidenciado la presencia de pueblos no contactados o en aislamiento voluntario. Las actividades de Repsol forzarían el desplazamiento o la muerte por contagio de estas poblaciones, constituyéndo un ETNOCIDIO.
4. Mediante bloques de exploración, gasoductos, terminales portuarias y petroquímicas Repsol genera un listado enorme de pasivos ambientales no reconocidos que poco a poco son visibilizados, documentados y cuantificados. Algún día la compañía tendrá que responder por ellos y reinvertir los beneficios en su reparación.
5. Repsol YPF enfrenta causas judiciales por estafa a los trabajadores argentinos de YPF (CAUSA PENAL 8568/99), una demanda de 445 millones de dólares para reparar las comunidades contaminadas en Loma de la Lata (Neuquen, 2002), por vertido de fenoles en el río Francolí (Tarragona, 2008).
Por eso, sugerimos a los accionistas de de Repsol YPF:
1. Intervenir en la Junta General de Accionistas 2009, exigiendo un cambio de la política expansionista de la empresa, una retirada urgente de los territorios indígenas y áreas protegidas e iniciar la catalogación transparente y reparación de los pasivos ambientales.
2. Retirar sus acciones de Repsol YPf para no ser complices de los actos de cuestionable legalidad de la empresa.
3. Participar activamente en la investigación y difusión de los delitos ambientales y sociales ocasionados por Repsol-YPF impulsando iniciativas judiciales para que no queden impunes.
En un planeta en crisis, todos somos responsables de nuestras inversiones y nuestros actos.
FIRMA: Campaña Internacional de Afectad@s por Repsol YPF
Toni Sánchez Poy
DNI. 52.175.519 L
Rambla Poble Nou, 64. 2º1ª 08005 Barcelona