La visita del presidente estadounidense a Irak es la primera desde su llegada a la Casa Blanca y su tercera en dos años.
«Llegó el momento de ceder» el control «a los iraquíes. Tienen que asumir la responsabilidad de su país», añadió.
Según el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, la opción de Irak en vez de Afganistán la dictó la proximidad con Turquía, la necesidad de reunirse con los responsables iraquíes de seguridad y el deseo del presidente de visitar a las tropas estadounidenses.
«Nuestros hombres y mujeres que están en primera línea, en Irak como en Afganistán, se merecen nuestro mayor respeto», declaró Gibbs.
Obama se reunió con el primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki y con el jefe de Estado de Irak, Yalal Talabani. Reiteró que todos los soldados de EE.UU. habrán salido de Irak para 2011
Antes de llegar a Bagdad, Obama se reunió en Estambul con varios líderes religiosos de las confesiones musulmana, cristiana y judía, visitó la basílica de Santa Sofía y la Mezquita Azul y contestó a las preguntas de un grupo de estudiantes turcos en el centro cultural de Tophane.