Agencias
Una epidemia de gripe porcina causó 20 muertes confirmadas y otras 40 posibles en México, donde se suspendieron las clases y se cerraron museos y teatros, mientras en EEUU se registraron al menos ocho infectados y otros siete países adoptaron medidas preventivas.

«Ha habido 60 fallecimientos con cuadros similares. Se ha comprobado que de éstos, 20 derivan de esta enfermedad y los otros 40 están siendo analizados», dijo este viernes en una rueda de prensa el ministro de Salud, José Ángel Córdova. El ministro indicó que se trata de «una epidemia, no una pandemia» y anunció que se han acreditado 1.004 casos que están en estudio en la capital y zona metropolitana, donde viven 20 millones de personas, una de las áreas más pobladas del mundo.

Casi de forma simultánea, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó en su sede en Ginebra de que son 18 los muertos confirmados por gripe porcina en México, mientras que autoridades sanitarias en Estados Unidos señalaron que sumaron 8 los casos por la enfermedad, con solo una persona hospitalizada.

«Estos acontecimientos son muy preocupantes», dijo la OMS en un comunicado, que activó la llamada sala de operaciones, que coordina acciones ante situaciones de emergencia sanitaria.

Las clases desde el nivel preescolar hasta el universitario fueron suspendidas en la Ciudad de México y el Estado de México, donde también cerraron sus puertas los teatros y museos. Además, los dos partidos de la liga mexicana de fútbol previstos para el domingo en Ciudad de México se disputarán sin público, anunció la Federación Mexicana de Fútbol.

El servicio de metro, que transporta 4,5 millones de personas diariamente, distribuye mascarillas gratuitas para evitar el contagio entre los pasajeros, así como militares en cinco puntos de alta concurrencia de la capital.

A raíz de la epidemia, el presidente Felipe Calderón suspendió una gira que tenía prevista el viernes por el estado de Chihuahua, en la frontera con Estados Unidos.

En el aeropuerto de la Ciudad de México se han desplegado brigadas médicas, se realiza a todos los viajeros cuestionarios sobre su estado de salud en el momento de subir o descender de un avión, y ante cualquier síntoma de gripe se les exhorta a recibir atención médica y a no viajar.

Ante esta alerta, otros siete países americanos -Nicaragua, Perú, Chile, Costa Rica, Brasil, Canadá y Colombia- adoptaron el viernes medidas de prevención para evitar el ingreso de la epidemia a sus territorios, entre ellas la vigilancia estricta de cargas, equipajes y seguimiento de casos sospechosos en aeropuertos, pasos fronterizos y puertos.

Según el ministro mexicano de Salud, el mal se generó por un nuevo virus «de la influenza porcina que en 1976 y 1988 dio algunos casos aislados en Estados Unidos» y probablemente provino de Europa o de Asia. «Dado que parte del genoma es del puerco euroasiático, esto sin duda tuvo que haber sido originado en una de estas zonas del mundo, mutó y fue transportado por un individuo y después empezó a reproducirse», explicó.

Córdova afirmó que en caso de que se presenten más contagios, el gobierno federal cuenta con más de un millón de dosis de antivirales de actuación específica para atender a la población.

Las autoridades sanitarias capitalinas habían anunciado una campaña de vacunación masiva con las mismas dosis que se utilizan para la gripe, aunque el ministro del distrito, Armando Ahued, admitió más tarde que la OMS aconsejó utilizar el antiviral.

Ahued sostuvo que en la capital, de ocho millones de habitantes, se registraron 13 de los 20 casos mortales. Las autoridades recomendaron a la población no acudir a lugares concurridos, no usar transporte público, utilizar mascarillas, lavarse las manos y no saludar con la mano ni besarse.

Los síntomas del mal son temperatura superior a 39 grados, dolor de cabeza y dolores musculares intensos, cansancio, escurrimiento nasal, estornudo e irritaciones en la garganta.

La gripe porcina, un virus gripal de tipo A, puede expandirse de manera muy rápida.